Ecuador,
un país que le apunta a la innovación y al desarrollo del conocimiento
(Andes).- Ecuador ha empezado en los
últimos años un proceso de desarrollo en la innovación y la tecnología al
invertir no solo en educación, sino además en ideas y proyectos de cientos de
ciudadanos que antes del actual gobierno no contaban con las posibilidades, principalmente
económicas, para llevar adelante sus emprendimientos, inventos o creaciones.
A fines de marzo de este año, la Secretaría
Nacional de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt)
entregó un capital semilla, de 50.000 dólares, a varios de los proyectos
inscritos en una atractiva iniciativa para inventores e innovadores: el Banco
de Ideas.
Esta propuesta es un portal web en el que los
ciudadanos pueden registrar proyectos, investigaciones, prototipos para recibir
apoyo estatal y servicios especializados, Además de desarrollar componentes
creativos, tecnológicos e innovadores.
El Banco de Ideas ha recibido hasta la fecha más de
3.100 proyectos, la mayoría presentados por jóvenes menores de 30 años, lo que
muestra un nutrido interés en la innovación y el desarrollo de inventos, algo
que antes de 2008 no era evidente.
Ecuador, un país de innovadores
Humberto Tello, un joven cuencano que está a punto
de graduarse de ingeniero electrónico, es una de las personas que ingresó su proyecto
en el Banco de Ideas y se hizo acreedor al ‘capital semilla’ para desarrollar
el ‘Mouse Head’, un innovador dispositivo que permite la interacción entre
personas con cuadriplejía y un computador, para la realización de varias
funciones informáticas con movimientos de la cabeza del usuario.
El sistema tiene conexión inalámbrica, funciona a
batería y es recargable por el puerto USB, funciona en cualquier sistema
operativo y no depende de una instalación compleja.
Este joven de 25 años, en diálogo con la Agencia
Andes explicó que la idea de empezar con este proyecto inició tras el accidente
de uno de sus buenos amigos que lo dejó postrado con un cuadro de tetraplejia.
Sin embargo, en el desarrollo del prototipo, surgió
la idea de que este sistema no solo sea utilizado para computadores, sino
también para sistemas de iluminación, para accionar motores de sillas de ruedas
o controles de televisión.
Otro joven innovador es Héctor Velasco, quien
desarrolló el proyecto ‘Inlliyaku’, un calefón eléctrico y electrónico que
aportaría al cambio de la matriz energética que lleva adelante el gobierno
ecuatoriano.
Este es un sistema de calentamiento de agua que
permite regular la temperatura de manera ágil y ahorrar en el consumo de
energía, gracias a una tarjeta electrónica instalada en su interior.
Según dijo a Andes este joven administrador de
empresas, su proyecto le ha apostado por el talento nacional, tanto así que
alrededor del 70% de sus componentes están realizadas con piezas y materiales
hechos en el país suramericano.
Ambos innovadores consideran que la actual política
de apoyo a la denominada economía del conocimiento ha permitido que sus ideas y
los proyectos de otras personas puedan desarrollarse, materializarse y se
perfilen a ser producidas, algo que antes era casi impensable.
Al respecto, Rina Pazos, subsecretaria de Ciencia,
Tecnología e Innovación dijo a Andes que el Estado ecuatoriano tiene un impulso
fuerte hacia el financiamiento en la investigación y la innovación, pero además
incentivos económicos para el sector productivo privado interesado en intervenir en estos procesos del conocimiento.
La funcionaria destacó el ‘capital semilla’ para el
desarrollo de proyectos innovadores. “En una encuesta hecha en 2012 pudimos ver que
los emprendimientos innovadores encuentran financiamiento en recursos propios
del innovador y eso hace que el número de emprendimientos que surja sea
limitado”.
Según Tello antes de la implementación de estos
incentivos, cuando un inventor generaba un dispositivo viajaba al extranjero
donde vendía su idea porque en Ecuador no había gente interesada en invertir.
“Ahora yo puedo hacer que mi sistema se produzca en
Ecuador, se venda en Ecuador se exporte desde Ecuador y que el mundo sepa que
la gente en este país es capaz de hacer las bien las cosas”
.
Un reparto más equitativo en las regalías entre el
inventor y el inversor
Con el objetivo de construir un pacto con los
diferentes sectores del país con la innovación para lograr una articulación
entre la academia, el Estado y el sector productivo, el Senescyt está
estructurando el ‘Código Inenios’ para ser presentado en las próximas semanas a
la Asamblea Nacional.
Uno de los puntos de esta iniciativa es establecer
un reparto más justo en las regalías que genera una investigación o una patente entre
el inventor y el financista.
“Una de
las cosas que se tiene en cuenta cuando se está generando un dispositivo es que
cuando toca producirlo se necesita un inversor y este exige un porcentaje alto
que no es justo pero a veces la necesidad de tener el dinero predomina”
cuestionó Humberto Tello.
Velasco
recordó que cuando quería financiar su proyecto buscó apoyo en el sector
privado, sin embargo se topó con una realidad: querían financiar pero siempre
querían que la repartición de los beneficios sea minoritaria para las personas
que inventaban”.
Al
identificar esta situación fue necesario incluir en el Código un reparto más
equitativo que para la subsecretaria Pazos aseguró que en la iniciativa próxima
a entregarse al Legislativo se establece que en el centro de este sistema de
producción de conocimiento se encuentren los investigadores e innovadores”.
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