Una bocanada de aire recibió la Caja
Fiscal con el ingreso de USD 900 millones provenientes de dos préstamos
internacionales. El Gobierno requiere un financiamiento de USD 4 900 millones
para cuadrar las cuentas públicas. Además de otros USD 2 000 millones para las
últimas etapas de ocho proyectos hidroeléctricos. Por ello, el crédito de
Goldman Sachs, por USD 400 millones, y la asignación de USD 500 millones por
parte de China, reducen en algo esas necesidades. Este dinero es de libre
disponibilidad. En el caso del banco americano, la adjudicación del crédito, al
4,3% anual, implicó una garantía con una transacción de oro. Es decir, el
Ecuador entregó un poco más de la mitad de sus reservas a Goldman Sachs y este
le paga un interés. El vínculo con el nuevo acreedor ecuatoriano se prevé que
sea mayor, ya que según el Ministerio de Finanzas "se está trabajando en
la preparación de otras operaciones de financiamiento con este banco
internacional y otros actores relevantes del mercado global de capitales".
Cabe recordar que el 2 de septiembre del
año pasado, el Comité de Basilea de Supervisión Bancaria y la Organización
Internacional de Comisiones de Valores reguló sobre el tipo de activos que
pueden ser utilizados con fines de garantía en los mercados e incluyó al oro.
Por eso, estas transacciones, de alguna
manera, están vigiladas a escala internacional, para evitar que se realicen
transacciones que pongan en riesgo a las economías, tal como ocurrió durante la
crisis financiera del 2008.
Pero no todos creen eso. Un análisis de la
Revista Fortune cuestiona la operación y se pregunta "si es tan buen
negocio, ¿por qué nadie más está intercambiando su oro por instrumentos
financieros?
Y hace un recuento de los problemas
derivados de transacciones similares, como el de Grecia, y de cómo Venezuela se
echó para atrás hace un año con Goldman Sachs en una operación similar a la que
realiza ahora Ecuador.
En todo caso, los recursos que el Gobierno
nacional necesita siguen llegando. La segunda fuente de ingresos fue confirmada
por el ministro de Sectores Estratégicos, Rafael Poveda. Según el funcionario, hasta julio se prevé
que lleguen USD500 millones de libre disponibilidad, desde el Banco Comercial
de China. Este dinero forma parte de una línea de crédito que está conformada
por otros USD 1500 millones que se destinarán a la empresa Petroecuador para
los trabajos en la Refinería del Pacífico. Además, un segundo tramo, de USD 7
000 millones, ingresaría en septiembre para ese complejo.
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